—No puedo acceder a un simple capricho. La verdad es que ya le expliqué a tu hermano que no quiero tener ninguna clase de privilegio, pues me gusta esforzarme, pero en este momento no me siento en condiciones para hacer nada. Quiero encontrarme a mí misma y el mundo de la música popular no es lo que va conmigo exactamente… Lo siento, pero deberá buscarse otra bailarina — Volcó la mezcla en la tartera para luego ponerla en el horno.