Kenji asintió aun con la mirada perdida. Una vez estando con el torso desnudo, se podían apreciar ciertos cortes y moratones de muchos colores.
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Aruto miró con cierta curiosidad esa acción. Se quedó observando levemente la vidriera de aquella tienda, como tratando de descifrar algo.
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—Aun no hemos terminado. Puedes reprocharme después — lo paseó por otros locales —Espérame aquí fuera — Se fue a una joyería y compró una cruz de oro blanco muy pequeña con el nombre de él tallado en el dije — Listo, sigamos.
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—Bueno , hay tiempo para todo — dejó la guitarra a un lado y se abrazó las piernas.
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-Youhei... - Abrió los ojos sorprendida - Esto ni siquiera es una cámara digital.