- ustedes también - murmuro antes de volver su atención a Ornella- demasiados, el señor feudal es un maldito viejo verde corrupto y para completar su hijo es igual, mientras que el pueblo muere de hambre el se da grandes festines, si la ciudad aun está en pie es porque entre nosotros y el primer ministro nos hemos ayudado entre todos, de otra forma ya abríamos derrocado al señor feudal hace mucho- apreto el puño conteniendo la rabia, odiaba a todos los políticos y monarcas, excluyendo al primer ministro que parecía ser el único cociente de la situación de la ciudad