Es que al grabarlo se puede escuchar cada detalle, con tan solo cerrar los ojos y ponerse a oír todas aquellas notas ejecutadas delicadamente, sutilmente, disfrutando de los sentimientos plasmados en ellas ; ya sea dulzura o melancolía…
No es raro. ES GENIAL.
Principalmente porque nadie te entiende. Lol~
Tengo bastantes, generalmente porque desde niña ya creaba los míos propios sin basarme en ninguno, dado la poca cultura que en ese momento tenía. Cuando creces y te vas llenando la cabeza de cosas, vas perdiendo cierta originalidad… pero siempre recuerdo a esa Snade de los ocho años para abajo que terminaba siendo siempre una caja de sorpresas en esas cuestiones. <--- Ferviente defensora del niño interior.