-Si, aunque a ella no le gustaba que le dijera que le iban a dar.- rió suavemente.
--
-De nada.- sonrió, y luego le ayudó a levantarse, igual a Mizki.
-Bueno a lo que vine, me enseñaras a montar a caballo ¿verdad, Kiyo?- sus ojos brillaban.
Kiyoteru se mostró algo asustado con la idea, volvió a ver a Yuuma con la misma expresión.