Cementerio alquila criptas por horas a parejas emosCrisis y falta de escrúpulos son buenos compañeros; y donde algunos proponen contener gastos, otros son más partidarios de tirarse a la piscina, despojados de sus miramientos, e inventar modelos de negocio que, si no habían aparecido hasta ahora, es porque aún no nos llegaba el agua al cuello. Cenobio Hinojosa, dueño de la funeraria La patita estirada, notó que las deudas ya le rozaban la barbilla y decidió sacar partido de las criptas del cementerio de Cerdanyola del Vallès alquilándolas como nidos de amor a jóvenes góticos de la zona.
Por un módico precio a la hora y atractivas tarifas para toda la noche, el cliente puede profanar una de las rancias criptas de las familias de la burguesía catalana, equipadas con candelabros y antorchas, murciélagos y arácnidos, confortables ataúdes e incluso ropas decimonónicas. Allí puede sencillamente aplacar su angustia vital abrazado a auténticos restos humanos, o, si lo prefiere, disfrutar de la compañía de un alma gemela.
La oferta, de hecho, se ha popularizado entre parejas de adolescentes emos que, a falta de un espacio íntimo donde retozar lejos de miradas de adultos, o de gente viva en general, que es muy frívola, alquilan una cripta para convertirla en el burtoniano escenario de su eterno amor. Hacer el amor sobre una fría losa de mármol, a la luz de una vela derretida sobre un cráneo humano ya está al alcance de todo romántico por unos pocos euros. ¿A qué esperáis? Los vivos no os comprenden, y los muertos tampoco van a quejarse.
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