Esta siguió comiendo mientras tarareaba la canción que había compuesto con Oliver.
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Al llegar lo primero que se vieron fueron mil maravillas para animalitos, al fondo habían unos peces, pájaros y algunos cachorritos.
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-No, no te lances!...- advirtió, pero fue muy tarde, este rebotó cayendo fuera del sillón, intento no reír por lo gracioso de la escena.