Meian sujetó bien a los niños y empezó a buscar con la mirada para ver si no había otro bicho.
-Pues yo no voy a esperar - Dejó a Aimo adentro , en el corralito , una vez que estuvo calmada. Se fue a la casa de al lado a quejarse - ¡Oiga! ¡Que mierda se supone que hace con sus animales? ¡Los suelta? Una alacrán casi me mata , ahora una cobra quiso atacar a mis hijas... y encima viene una tarántula.
-Pues yo tengo que oír su música de mierda y no me quejo - Le cerró la puerta en la cara.