- Si, Ama - sonrió, mientras la tallaba bien, sintió la necesidad de tocarla con la palma de la mano, se estremeció al sentir su calor.
...
Tomó su mano y comenzó a jalarla con él - Vamos ya a casa, es tarde -
...
- Amo E-Evan... Amo... Ah - se retorció, también sus manos... Le gustaba... Que la tocara entera, que jugara con su boca ahí... Su amo...
Un sonidito, como de un teléfono la devolvió al mundo real, lo sintió como una bofetada - A... Amo... -