Nombre: Ser yo
Autora: Dresti
Género: romance
Clasificación: todos los públicos
Publicaciones: MundoSasuSaku, imperio-shippuden y anteriormente Fanfic.es
;D
La vida se reduce a una pequeña decisión, ser tú y subirte al tren sin importar los que suceda o quedarte en la estación por miedo.
En la vida, o eres tú o no eres nadie.
Siempre he sido una estúpida en todos los sentidos.
Desde pequeña estaba obsesionada con ser la más linda de las chicas.
Con ser la más lista.
Con ser la más fuerte.
Con conseguir al niño más lindo.
Y realmente conseguí todo eso, ¿pero a qué precio?
Mi mejor amiga se peleó conmigo y nunca más volvimos a tratarnos, me convertí en una estúpida y odiosa chica que creía que lo hacía todo bien cuando todo estaba mal.
Fui una estúpida cuando me reí de la frente de Sakura, fui una estúpida cuando me reí de la gordura de Chouji, y sobre todo, fui una estúpida cuando Shikamaru me confesó su amor y yo le dije que nunca andaría con alguien como él, que yo me merecía alguien mejor.
----Flash Back----
-¿Qué es lo que acabas de decir?-pregunté con arrogancia mirándolo por encima del hombro.
Shikamaru tenía un ligero rubor en las mejillas mientras su mano derecha agarraba con fuerza un ramo de margaritas.
-No seas problemática, me escuchaste perfectamente, dije que me gustas.
Me eché a reír.
-¿Y crees que alguien como tú, que siempre te quejas de todo y que no eres popular, va a poder andar con alguien como yo?-dijo-por favor, no seas tan iluso.
Pude ver en la cara de mi compañero como digería ese bruto rechazo.
Mientras yo me seguía riendo, él se fue, con la cabeza gacha.
----Fin del Flash Back----
Desde aquellas Shikamaru se alejó de mí y empezó a verse con una chica de Suna, la hermana del Kazekage.
La semana pasada recibí las dos noticias que hoy hacen que esté aquí, recordándome lo estúpidamente superficial que he sido.
1º noticia: Shikamaru y Temari se casan hoy mismo.
2º noticia: Asuma-sensei fue asesinado por un miembro de Akatsuki dos días después.
No fue hasta entonces que me di cuenta de lo tonta que he sido, nunca valoré a Shikamaru porque siempre ha estado a mi lado y hasta que lo he perdido para siempre no he sido consciente de lo necesario que es para mí.
En cuanto a Asuma-sensei...su muerte me hizo abrir los ojos y darme cuenta de que en la vida no hay segundas oportunidades y yo he perdido todas las mías.
Perdí a mi mejor amiga Sakura y a la persona que amo, Shikamaru.
Ahora estoy sentada en un banco, en medio de la calle, maquillada y con un vestido azul palabra de honor largo preparada para ir a una boda que romperá el último pedazo que me queda vivo de corazón.
Una fina lágrima escapa de mis orbes azules, mientras mi mirada se mantiene clavada en el suelo, con el pelo rubio tapándome la cara.
-Las niñas lindas no deben llorar-me dijo una voz suave, a mi lado.
Alcé la cabeza y vi a Shikamaru a mi lado, sonriéndome con dulzura.
-¿Qué haces aquí?-pregunté sorprendida-te vas a casar dentro de dos minutos.
-¿Tú qué crees que hago? no puedo casarme si la novia no va a la boda.
Lo miré con confusión mientras él volvía a sonreír.
-Mira que eres problemática-susurró-no tiene caso que me case con alguien a quién no quiero y que mucho menos me quiere a mí.
-¿Q-qué...qué quieres decir?
-Yo no quiero a Temari y ella no me quiere a mí, hemos necesitado un año de novios para darnos cuenta de que no íbamos a parar a ningún lado-luego clavó sus ojos en mí-yo siempre te he querido y sé que tú a mí también, aunque tardaste en darte cuenta.
Otra lágrima abandonó mis ojos sorprendidos. Él extendió la mano y la limpió.
-Sé que has cometido muchos errores pero eres consciente de ello, Sakura piensa al igual que yo y está dispuesta a perdonarte.
Mi mente era incapaz de procesar tanta información.
Algo debió pasar por la mente de Shikamaru porque bajó la mirada algo sonrojado.
-Sé que antes de decir este tipo de cosas se necesita unos meses de noviazgo, pero nosotros nos conocemos desde pequeños para saber cómo somos, esto es muy problemático, pero aún así...
De repente una gran determinación lo abrumó y me agarró con fuerza las manos mientras me daba algo.
Yo miré anonadada a la pequeña caja de terciopelo que me entregó. La abrí con manos temblorosas y casi me quedo sin aliento cuando vi el precioso zafiro engarzado al fino anillo de oro.
-Ino...tú...-la indecisión lo invadió-tú... ¿quieres casarte conmigo?
El corazón se me salió del pecho, él me miraba con cierto temor.
Yo estaba segura, nunca más perdería mis oportunidades.
Sonriendo me lancé a sus brazos y lo abracé.
-Claro que sí, te quiero, no, te amo, Shikamaru, claro que quiero casarme contigo-dije.
Él correspondió a mi abrazo, feliz.
Nos separamos un poco solo para poder juntar nuestros labios en un primer beso mágico.
Chicas y chicos, nunca queráis aparentar lo que no sois, vivid vuestra vida siendo aquella persona que vive en vuestro interior.
Si ves pasar un tren, o lo ignoras y te quedas en la estación, esperando a otro tren que consideras más digno de ti, o te subes al tren y eres feliz.
La vida es un tren que solo pasa una vez, yo lo dejé pasar pero rectifiqué a tiempo y logré subirme en el último vagón.
-Te amo Shikamaru-susurré mientras volvía a abrazarlo.
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