Con su permiso, voy a brincar un par de años después por un momento y luego volveré al presente.
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Cinco años después… Día Domingo.
-Y este será el último mail que te envíe en la vida- dijo Kokone con el cabello algo más crecido , principalmente su fleco que lo peinaba hacia ambos costados, que esta vez le llegaba por el mentón.
“Nos estamos viendo en la plaza esta tarde.
Te quiero, Kokone-chan”
Le dio enter y sonrió , paciente por esperar una respuesta.