Bruno se sacó el sombrero con una mirada embobada.
-Iría si Clarita no se enojara conmigo. Esta presentación es la hostia – dijo en el aire, controlando el audio desde atrás de todo.
-¿Nadie? – alzó la mano y se la puso por encima de los ojos, como queriendo distinguir mejor a la gente. Y vio a la presa de ese día, que por culpa de Lauren, no había podido hacer nada– Es una lástima. Pero me obligan a pasar por las mesas – dijo haciendo su show, paseándose por cada una de las mesas que habían por el lugar. Y se detuvo en la de Kurami. Se subió encima de la mesa y empezó a cantar desde allí , mientras el reflector le hacía lucir las medias color carne que le llegaban hasta por la mitad del muslo y el brilloso vestido negro .
El vestido es como el de la mujer.