-Lo has hecho , tu recompensa - Se dejó besar.
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-Pero mami Rin no me ha dejado venir nunca. Y tampoco me va a dejar.
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-Lo se. Aun así quiero que me acaricies.
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Se veía su cuerpo estampado en el suelo , inmóvil , sin vida.
Un charco de sangre estaba debajo de su cabeza. Ya no había nada mas que hacerle.
Varios curiosos ebrios y drogadictos , se acercaron a ver con impresión la situación.
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-Está bien - Se quedo en silencio - Me alegro que la canción haya sido un éxito.