Una vida simple en pocas palabras esa era mi manera de vivir, salir, convivir con mis amigos…cosas de chicos, pero sin saber que algo horrible se escondía en mis venas, era algo que no quisiera ser ni en mis peores pesadillas, no podía decírselo a nadie…porque quien me creería?, estaba atorada en mis propios pensamientos y palabras.
Lo único que podía hacer era aceptarlo, no tenia opción pero que tal si no pudiera controlar mi sed de sangre, tengo un hermano menor y mi madre…no los quería asesinar así que tome mis cosas y hui.
Paciencia, tragedia, odio, sangre…Muerte, esas palabras siempre estaban en mi cabeza.