Disclaimer: Naruto es propiedad del maestro Kishimoto, yo solo lo tome prestado para hacer este Fanfic.
Autora: Antifashion19.
Genero: Drama/Romance.
Pareja: Sasuhina.
Aclaraciones del Capitulo:Blablablabla. -Narración Normal.
Blablablabla. -Intervención mía.
++MENTIR++
“Una mentira repetida adecuadamente mil veces se convierte en una verdad.”
=Paul Joseph Goebbels=
Abres los ojos completamente, y ves que estas de nuevo en ese “sitio desconocido”. Es la misma habitación de color blanco, tan blanco…Que ya te da asco.
Sabes que no estás en un hospital, lo sabes desde hace una semana; en aquel día donde te enteraste que estabas comprometido con una desconocida.
Hinata es su nombre, primogénita de Hiashi, líder del clan Hyuuga.
Si que debes estar sorprendido…Bueno, no tanto, después de todo eres un Uchiha y para los Uchihas siempre lo mejor de lo mejor, ¿No?
Deberías sentirte bien, supongo que tu prometida esta “mejorcita” que tus locas fans.
Entiendo, sé que hay algo que te incomoda, algo que por instinto sabes, desde que esa joven te hablo sobre su compromiso; lo sabes bien…Ella miente.
Puede que tal vez solo estés alucinando, aunque yo lo llamaría “Trastorno de Ideas Delirantes”; pero debo darte la razón, porque eres Sasuke Uchiha y tú nunca puedes estar equivocado.— Con el hilo por delante de las agujas, insertar la aguja de la mano derecha, y de derecha a izquierda, por el frente del primer punto de la aguja de la mano izquierda…Pasar el hilo por encima y alrededor de la aguja derecha, en sentido contrario a las agujas del reloj. —Susurro el azabache, concentrado en su labor. —Esto es tan fácil.
Pero se dio cuenta de las cosas
“raritas” que estaba haciendo.
—Hyuuga. —La llamo. — ¿Por qué demonios estoy haciendo esto?
La joven lo regreso a ver, mientras afila sus armas ninja.
—Tsunade-sama, recomendó esos ejercicios para que recuperes tu movilidad. —Explico ella. —Así te recuperaras pronto.
— ¿De qué me sirve tejer? —Pregunto molesto. — Mis puntos de chakra no se reconstruirán con esto.
La Hyuuga rodó los ojos y siguió con su labor. Sus dedos mostraban cortes recientes.
—Auch. —Se quejo.
El Uchiha la vio seriamente, mientras la joven miraba la herida que ahora tenía en su dedo.
—Eres torpe. —Hablo arrogante. —Dame eso. —Exigió, quitándole las kunais que ella afilaba.
Sus manos se tocaron levemente…
¿Lo sentiste?
Esa extraña corriente eléctrica recorriendo cada fibra de tu piel.
No, no creo que sean calambres…Quizás solo sea: Electricidad estática.Ves que ella se sonroja, y baja la mirada; juega con sus dedos. En ese momento ella se te hace una extraña, no es la misma chica que te enfrento la vez pasada, ni mucho menos se acerca a la joven que te reta cada mañana.
Hay algo extraño aquí.
— ¿Cómo es que te conocí Hyuuga? —Pregunto serio.
Ella abrió lo miro sorprendida; sus manos temblaban, también sudaban. Trago saliva y sonrió nerviosa.
— Es una historia muy larga. —Soltó.
—Tengo todo el tiempo. —Se acomodo en el sofá. — Eso me ayudara a recordar más cosas…
Hinata se quedo callada, cerró sus ojos y suspiro.
¡Eres perverso!
Sabes que así ella podría delatarse, si es que está mintiendo.El silencio se alargó.
La tienes…No puede mentir ágilmente. No esperaba nada menos de un Uchiha.— Fue como una atracción inconsciente. —Hizo una pausa.
Sasuke la miraba sorprendido.
—Durante nuestra infancia, nunca habíamos hablado…Yo era muy tímida, y tu, eras inalcanzable para mí. —Respiro profundo. —Escondida entre los árboles, observándote entrenar, viendo cómo te esforzabas para ser mejor…Para superar a los demás.
— ¿Así que eras una acosadora? —Pregunto molesto.
Ella negó frenéticamente.
—Te admiraba. —Sonrió, mientras cerraba sus ojos. —Pero para ti era invisible.
—Estaba concentrado en otras cosas. —Se encogió de hombros.
—Después te fuiste, y eso fue un duro golpe para…—Se detuvo de golpe. —Mi, para mí fue un duro golpe.
El Uchiha recordó las cosas que dejo atrás, para marcharse a lado de Orochimaru. Cosas que perdió y no creyó recuperarlas.
—Después la cuarta guerra ninja llego. —Trago saliva. —Estabas en nuestra contra, la oscuridad te había absorbido…
—El odio me cegó. —Agrego, mientras miraba hacia otro lado.
—Lo sé…Pero al final, pudiste ver el camino correcto y nos ayudaste a vencer a Madara. —Sonrió. —Ayudaste a N…Konoha, por esa razón saliste gravemente herido.
—Recuerdo eso, la batalla, e incluso el lo vencimos. —La miro serio. —Pero aun no sé como entraste “en mi vida”.
—Estuviste hospitalizado, tus heridas eran graves—Suspiro. —Por esa razón Tsunade-sama te puso a mi cargo, para que yo te cuidara durante tu recuperación.
— ¿Y el amor llego? No trates de engañarme. —Se levanto molesto. — ¿Por qué tú? ¿Por qué no otra persona?
—Fue casualidad…Ó el destino. —Trato de apaciguarlo. —Pero eso logro que tu y yo…
—Mientes. —Hablo molesto. —Mientes, no te creo nada…Así que dime la verdad de una vez.
Hinata llevo sus manos a su boca, tratando de no gritar.
—No miento. —Se acerco lentamente a él. —Te estoy diciendo la verdad.
— ¡Hyuuga! Puedo ver tu nerviosismo a flor de piel, ¡Así que no me vengas con eso de que: Me estás diciendo la verdad! —Grito.
Hinata temblaba e iba retrocediendo asustada.
Sasuke si que eres muy amable, eres todo un “príncipe azul”.—Yo no miento. —Soltó.
Y sin darse cuenta ya se encontraba contra la pared; los ojos azabaches eran de un depredador que estaba a punto de devorar a su indefensa presa. Hinata temblaba y no era de excitación.
El tomo las dos manos de la Hyuuga y las apretó fuertemente, para que así ella no pudiera atacarlo.
Vaya, con que ahora tienes la manía de golpear mujeres. Si que eres todo un verdadero ninja. Anda golpéala…El activo su sharingan, y Hinata solo cerro sus ojos de golpe. Los temblores se intensificaban; él lo noto y se tranquilizo.
—Demuéstramelo. —Susurro, soltando sus manos. —Una prueba de lo que dices es verdad.
Hinata abrió lentamente sus ojos, y lo miro sorprendida. La expresión del Uchiha se acercaba a alguien que se avergonzaba de haberse equivocado.
¿Una prueba?
¿Era lo único que pedía?
¿Pero que podía darle ella para demostrar la veracidad de su relato?
Lo pensó detenidamente.
—Sabes, déjalo por hoy. —El azabache se fue alejando poco a poco.
Pero las pequeñas manos de la joven lo acercaron rápidamente a ella; sus labios habían chocado. Hinata lo estaba besando…Si ella lo hacía, y él no sabía qué hacer.
Si tan solo los latidos desenfrenados de su corazón lo dejaran pensar, tal vez así sería más fácil.
Ella se separo de él, sus mejillas sonrojadas y sus ojos acuosos no ayudaban para nada; lo hacían sentir extraño.
Quizás era eso a lo que nosotros le llamamos culpa.Llevo su mano a su boca, y se alejo lentamente; huía, por primera vez el, Sasuke Uchiha huía de una situación que no podía controlar.
— ¿Sasuke? —Se pregunto conmocionada la joven. — ¿Me crees ahora?
—Nos vemos mañana Hyuuga. —Fue lo único que pudo decir, mientras trataba de subir a su cuarto. —Una pregunta más…
Hinata lo miro detenidamente; él no se giro a verla.
— ¿Ellos están vivos? —Pregunto. — ¿Naruto y Sakura, están vivos?
La joven, mordió su labio inferior.
—Sí, ellos están vivos, muy vivos. —Respondió seria.
El Uchiha siguió subiendo las escaleras. Llego a su habitación, y entro.
Cerró la puerta de golpe y se dejo caer en el piso; aun no comprendía que había pasado…Lo único que sabía es que, quizás ella no mentía…Pero eso significaba algo mas; había dudado de su prometida, la joven que cuidaba de él.
Eres de lo peor, después que ella te contó tan bella historia de amor, tus dudas de ella. No eres muy buena persona que digamos.Y con esos pensamientos, cerro sus ojos, quedando completamente dormido.
Mientras que abajo, la joven Hyuuga se encontraba sentada en el sofá, con sus dos manos en la nuca, tratando de pensar en cómo detener su corazón que latía desbordado.
Unos pequeños golpes, la sacaron de sus pensamientos; se levanto y camino a la puerta.
— ¿Cómo estas Hinata? —Pregunto el peliplateado. —Espero que mi libro te haya servido para tu
“coartada”.
La Hyuuga estaba a punto de llorar.
— ¿Que sucedió? —Pregunto. — ¿Lo averiguo ya?
Ella lo negó.
—No se preocupe Kakashi-sensei, solo tuve una crisis existencial. —Sonrió nerviosa. —El aun no sospecha nada.
—Hinata se que estas mintiendo. —Su único ojo visible, la miraba serio. —Pero no voy a insistir, tu ya tomaste tu decisión…Veremos que sucede.
—Gracias. —Limpio sus lágrimas. —Pero pregunto por ellos.
Kakashi suspiro y de uno de sus bolsillos saco un sobre blanco.
—Ellos me han pedido que “lo busque”. —Le dio el sobre. —Quieren hablar personalmente con él.
Hinata rompió el sobre en el acto.
—No. —Soltó. —Ellos no deben enterarse que Sasuke está aquí…No deben saberlo.
—Hinata, debes entender que tarde o temprano ellos lo encontraran. —Puso su mano en el hombro de ella. —Si él está en modo ermitaño, lo encontrara fácilmente.
—Lo sé. —Su mirada temerosa cambio a una de determinación. —Pero cuando eso pase, Sasuke y yo estaremos lejos…Así que no hay nada de qué preocuparse.
Kakashi la miro sorprendido.
—Tal vez sea lo mejor. —Suspiro derrotado. —Bueno, me tengo que ir.
—Oh si, gracias por todo Kakashi-sensei. —Saco un libro de uno de sus bolsos. —Tome, después de todo no lo tuve que necesitarlo.
Él la vio dudoso.
—Entonces ¿Cómo le hiciste para crear tu coartada? —Pregunto.
—Fácil. —Sonrió nostálgica. —Solo imagine que él era Naruto.
Kakashi desapareció en una nube de humo; Hinata cerró la puerta, camino a las escaleras y subió.
Se dirigió a la habitación de Sasuke. Abrió un poco la puerta.
Pudo ver al Uchiha dormido, su respiración tranquila, la apaciguo. Se llevo su mano al rostro, tocándose sus labios con las yemas de sus dedos.
Un revoloteo en su estomago, la hizo despertar.
—Por el bien de todos. —Susurro. —Enamórate de mí…Por favor Sasuke, enamórate de mí.
Cerró la puerta lentamente.
— ¿Por el bien de todos? —Se pregunto el Uchiha.
Está bien, debo darte la razón…Hinata Hyuuga te está mintiendo. Pero tu pronto la descubrirás.
Gracias
Chibit por leer esta historia, aunque no te guste ver a Sasuke con Hinata. Jejejeje.
Nos vemos en el proximo capitulo.